Tras el éxito de la IA de OpenAI, multitud de proyectos han incluido en su nombre el popular acrónimo “GPT”. En la mayoría de los casos, se trata de empresas jóvenes que intentan aprovechar el tirón de la inteligencia artificial para posicionarse, pero también hay gigantes que se han subido al carro de ChatGPT.
IA más allá de ChatGPT
Hablamos de JP Morgan, que, según la CNBC, está desarrollando un asistente inteligente llamado IndexGPT. Su tarea será asesorar a los clientes de la firma, seleccionado activos y analizando su comportamiento basándose en sus perfiles y necesidades.
Otras entidades financieras importantes también están trabajando con modelos de inteligencia artificial. Es el caso de Morgan Stanley y su chatbot desarrollado por OpenAI. Jeff McMillan, ejecutivo de la firma neoyorquina, se ha mostrado bastante positivo con el lanzamiento de la herramienta:
“Ofrece el conocimiento del mejor gestor de forma instantánea. Creemos que es un elemento transformador para la compañía”.
Goldman Sachs es otro gigante financiero que ha reconocido el potencial de la IA, desarrollando un asistente basado en ChatGPT para ayudar a generar y modificar código de forma automática.
Está claro que el uso de la IA en el sector financiero no se trata de una novedad. Lo que convierte a IndexGPT en noticia es el público al que va dirigido. En palabras de Josh Gerben, abogado especializado en marcas, podría tratarse del primer producto derivado de ChatGPT para inversores minoristas.
¿Adiós a los Asesores Humanos?
No son pocas las voces que están poniendo sobre la mesa las posibles implicaciones que el lanzamiento de IndexGPT podría tener para los asesores humanos. ¿Podrían ser sustituidos en un futuro no muy lejano por modelos sofisticados de inteligencia artificial? Según Gerben, es bastante probable:
“Es una IA que selecciona valores. Me parece que quieren dejar a mi asesor financiero sin trabajo”.
Por suerte para el asesor de Gerben, la herramienta de JP Morgan tardará en estar disponible. Teniendo en cuenta el ritmo habitual de este tipo de procesos, la aprobación de la patente podría demorarse hasta 2024; el lanzamiento, hasta 2027.
Otros especialistas han optado por el sarcasmo para mostrar su descontento ante la proliferación de derivados de ChatGPT. Peter Schiff es uno de ellos. Horas después de publicarse la noticia sobre IndexGPT en la web de la CNBC, el popular comentarista financiero tuiteó:
“Me pregunto si el asesoramiento de la IA será tan malo como el que han estado ofreciendo sus asesores humanos”.